Estrategias de política integradas y coordinación de políticas regionales para un desarrollo resiliente, ecológico y transformador: apoyar a países asiáticos específicos asociados de la Iniciativa de la Franja y la Ruta para alcanzar la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible
Referencia del proyecto
PDF-SDG-2021-04
Entidad(es) de ejecución
UNCTAD
Asociados colaboradores
CESPAP, CEPE, PNUD, oficinas de los coordinadores residentes de los países que forman parte del proyecto Coalición Internacional para el Desarrollo Verde de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, Instituto de Estudios Estratégicos de Kazajstán, Red del Tercer Mundo de Malasia, Instituto de Política de Desarrollo Sostenible del Pakistán, Universidad Kadir Has de Estambul (Turquía)
Duración del proyecto
Enero de 2022 a diciembre de 2024
Alcance geográfico
Kazajstán, Malasia, Pakistán y Türkiye
Presupuesto aprobado en dólares
1 198 400 $
Descripción del proyecto
Desde principios de 2020 el mundo se ha visto muy afectado por la pandemia de COVID-19, que ha causado la pérdida de millones de vidas, la recesión económica más profunda desde la década de 1930, enormes pérdidas de empleo y una drástica disminución del comercio mundial y de la inversión extranjera directa, además de aumentar la urgencia de afrontar los persistentes retos del cambio climático. La pandemia ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad de muchos países en desarrollo. A corto plazo, el espacio fiscal de esos países se ha visto gravemente reducido debido a la escasez de liquidez, la fuga de capitales, la interrupción de la cadena de suministro, el sobreendeudamiento, entre otros, lo que ha dificultado especialmente el despliegue de paquetes de medidas de estímulo eficaces. A largo plazo, el cambio climático y otros problemas estructurales por resolver podrían obstaculizar sus esfuerzos por alcanzar los ODS. Ante estos retos polifacéticos y complejos es más importante que nunca que los países en desarrollo adopten estrategias de política integrada innovadora para lograr un desarrollo resiliente, ecológico y transformador. Sin embargo, muchos Gobiernos de países en desarrollo se ven limitados, no solo a la hora de movilizar recursos, sino también por la falta de capacidad institucional.
En este contexto, el proyecto pretende ayudar a los países destinatarios de Asia en sus esfuerzos por alcanzar los ODS y la transformación ecológica. El proyecto aprovecha el impulso generado por otro proyecto de 2018, financiado por la UNCTAD sobre Cooperación Sur-Sur, para el aprendizaje entre pares de otros países recientemente desarrollados que han crecido rápidamente. Con ese objetivo, ayudará a cuatro países específicos, que hacen frente a la apremiante tarea que supone tanto la recuperación de la crisis de la COVID-19 como la transformación ecológica y la participación en la Iniciativa de la Franja y la Ruta, a alcanzar la Agenda 2030 mediante 1) la formulación de estrategias de política integrada eficaces y la mejora de la capacidad a escala nacional, incluido el aprendizaje Sur-Sur entre pares; y 2) la cooperación económica y la coordinación política a escala regional. El proyecto mejorará la capacidad de los países para adoptar estrategias de política integrada innovadoras que aborden las vulnerabilidades y las limitaciones vinculantes para lograr un desarrollo resiliente, ecológico y transformador. El proyecto facilitará el intercambio de experiencias Sur-Sur y el aprendizaje entre pares, utilizando como punto de referencia la experiencia de China en la promoción del desarrollo de alta calidad, para ayudar a superar la falta de capacidad a la que se enfrentan los países del proyecto. Aparte de las medidas a nivel nacional, la cooperación transfronteriza, especialmente a nivel regional, también es crucial para reducir el costo y crear sinergias entre las iniciativas nacionales, ya que ni el virus ni el cambio climático respetan las fronteras. El proyecto tiene como objetivo crear una Red Asiática de Alianzas para el Desarrollo Ecológico (AGDPN) para fomentar las alianzas y reforzar la coordinación política en la región.
En este contexto, el proyecto pretende ayudar a los países destinatarios de Asia en sus esfuerzos por alcanzar los ODS y la transformación ecológica. El proyecto aprovecha el impulso generado por otro proyecto de 2018, financiado por la UNCTAD sobre Cooperación Sur-Sur, para el aprendizaje entre pares de otros países recientemente desarrollados que han crecido rápidamente. Con ese objetivo, ayudará a cuatro países específicos, que hacen frente a la apremiante tarea que supone tanto la recuperación de la crisis de la COVID-19 como la transformación ecológica y la participación en la Iniciativa de la Franja y la Ruta, a alcanzar la Agenda 2030 mediante 1) la formulación de estrategias de política integrada eficaces y la mejora de la capacidad a escala nacional, incluido el aprendizaje Sur-Sur entre pares; y 2) la cooperación económica y la coordinación política a escala regional. El proyecto mejorará la capacidad de los países para adoptar estrategias de política integrada innovadoras que aborden las vulnerabilidades y las limitaciones vinculantes para lograr un desarrollo resiliente, ecológico y transformador. El proyecto facilitará el intercambio de experiencias Sur-Sur y el aprendizaje entre pares, utilizando como punto de referencia la experiencia de China en la promoción del desarrollo de alta calidad, para ayudar a superar la falta de capacidad a la que se enfrentan los países del proyecto. Aparte de las medidas a nivel nacional, la cooperación transfronteriza, especialmente a nivel regional, también es crucial para reducir el costo y crear sinergias entre las iniciativas nacionales, ya que ni el virus ni el cambio climático respetan las fronteras. El proyecto tiene como objetivo crear una Red Asiática de Alianzas para el Desarrollo Ecológico (AGDPN) para fomentar las alianzas y reforzar la coordinación política en la región.