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Ernesto Gil Elorduy, Presidente de Parlamentarios Mundiales por el Hábitat, se dirige a la Asamblea General durante la sesión especial.
Ernesto Gil Elorduy, Presidente de Parlamentarios Mundiales por el Hábitat, se dirige a la Asamblea General durante la sesión especial dedicada al hábitat, el 7 de junio de 2001 en Nueva York. Foto ONU/Evan Schneider

Período extraordinario de sesiones de la Asamblea General sobre Hábitat: Estambul +5
6 a 8 de junio de 2001, Nueva York 

Antecedentes

Un examen quinquenal

Cinco a?os después de Hábitat II, la Asamblea General de las Naciones Unidas convocó una sesión especial dedicada a una revisión y evaluación generales de la implementación del . En la Sesión Especial de la Asamblea General, celebrada del 6 al 8 de junio de 2001, los Estados Miembros de la ONU acogieron con beneplácito el progreso realizado en la implementación del Programa de Hábitat y se comprometieron a acelerar sus esfuerzos para asegurar la implementación plena y efectiva del programa.

Parte del debate de la Sesión Especial se centró en la combinación de éxitos y obstáculos de países individuales, principalmente en el mundo en desarrollo, en el cumplimiento del doble objetivo del Programa de Hábitat: vivienda adecuada para todos y desarrollo sostenible de asentamientos humanos. Se abordó la dramática urbanización de la población mundial y los peligros asociados con su rápido ritmo.

En el informe final del período extraordinario de sesiones se se?aló que, si bien los gobiernos y sus asociados del Programa de Hábitat continuaron esforzándose por cumplir sus compromisos, "la pobreza generalizada sigue siendo el principal obstáculo y las condiciones ambientales necesitan mejoras significativas en muchos países. Es fundamental que la mayoría de las personas que viven en la pobreza todavía carecen de seguridad jurídica de tenencia de sus viviendas, mientras que otros carecen incluso de una vivienda básica. Por lo tanto, persisten graves obstáculos al desarrollo sostenible de los asentamientos humanos".

Al final, la Sesión Especial de la Asamblea General renovó el compromiso de los Estados Miembros con los principios de vivienda adecuada para todos y desarrollo de asentamientos humanos sostenibles mediante la adopción de la .